Los investigadores del Núcleo OHC Diego Carabias y Nicolás Ciarlo acaban de publicar un paper que analiza el sistema de lastre de hierro empleado en la barca Infatigable de la Armada de Chile, hundida en el puerto de Valparaíso en 1855. El artículo forma parte de un número especial de la revista Heritage, denominado Ship Archaeology and Material Culture: Artifacts, Representations, Structures, Narratives, Materialities (16th-19th Centuries).
Este estudio es novedoso porque aborda mediante técnicas arqueométricas (análisis metalográficos) un tipo de lastre empleado en veleros (en combinación con lastre de piedra) que ha sido escasamente investigado arqueológicamente, y concluye que probablemente los elementos procedían de diferentes lugares de producción. Puede ser quizás algo bastante especializado para medios de prensa, pero representa bien lo que busca la Línea 2 de OHC, conectando los estudios de cultura material procedente de pecios o naufragios, los buques de la Armada de Chile, la conservación y la aplicación de métodos de arqueometría.
El lastre es esencial para que los buques bajen su centro de gravedad, mejoren su estabilidad y faciliten su movimiento durante la navegación. Durante la Edad Moderna, los materiales pesados utilizados para lastrar los buques fueron motivo de especial preocupación tanto para las autoridades como para los armadores, sometidos a un control, una regulación y una normalización cada vez mayores. Estos elementos son un hallazgo muy común en los pecios y merecen especial atención, ya que sus características, distribución y procedencia pueden aportar información fundamental para evaluar dónde se lastró el buque, las rutas de navegación, el tonelaje del barco y los procesos de formación del yacimiento. Este artículo se centra en los lingotes de arrabio, introducidos a principios del siglo XVIII en los buques de guerra de vela y poco después en los mercantes de gran tamaño, un tipo de lastre que con frecuencia se pasa por alto en la investigación arqueológica. En particular, los especímenes recuperados del transporte armado Infatigable (1855) de la Armada chilena se analizaron mediante caracterización macroscópica y fisicoquímica utilizando LM, SEM-EDS, WD-XRF e IGF. Los resultados obtenidos indican que los lingotes se fabricaron con hierro fundido de diferente calidad, lo que sugiere que pueden proceder de distintos centros de producción. La investigación permitió comprender mejor las prácticas de lastrado en un buque de la armada sudamericana a principios del periodo posterior a la independencia y aportó nuevos datos para el debate sobre cuestiones tecnológicas externas y no náuticas, como los materiales, conocimientos y técnicas asociados a la producción de arrabio a mediados del siglo XIX.